Conforme avanzaron los años de vida de Internet, se ha incrementado exponencialmente el número de fuentes de información y se han creado una serie de servicios a los que el navegante puede acceder de acuerdo a sus necesidades y preferencias, sin embargo, esto también ha conllevado a que los proveedores de información aprendan, cada vez más, a realizar un seguimiento de los internautas a fin de indagar sobre dichas actividades.
Los motivos por los que suelen hacer esto es para mostrar de forma más precisa la publicidad mientras se navega o como un medio para aprender sobre el estilo de vida del navegante. A pesar de que estas motivaciones son aparentemente “inocentes”, pueden conllevar a otros fines de terceros que quizás no son los que un usuario permitiría, así que, sería recomendable que él pueda tener un mayor control de su seguridad cuando navega. Sigue leyendo